Esta fiesta se celebra todos los años, en un pueblecito muy pequeño, el más pequeño del Obispado de Tortosa, antiguamente había unos ochenta habitantes y en estos momentos solo viven dos familias.
Cada año hay un mayoral que es el que se encarga de organizar la fiesta, a los asistentes a la misa se les ofrece una “prima “ que las hacen los mayorales.
Existe el bot de la dena de la Llacova, compuesta por once masías, que son los mayorales por turno.
Antiguamente las “primas” las traían con las caballerías con unos “banastos” y cuando llegaban a la vista de la Llacova, se tocaban las campanas de la iglesia anunciando a los asistentes que pronto empezaría la misa porque ya llegaba el mayoral.