Muchos creen que la historia de Alquerías del Niño Perdido empieza con aquel grito de “JA SOM POBLE” que un 25 de junio de 1985 retumbó por toda la provincia y que marcaba el momento oficial en el que se segregaba del vecino municipio de Vila-real. Pero no, ya éramos pueblo, éramos un conjunto de personas en un mismo lugar, con nuestra historia y nuestros antepasados.